Cuando aparecieron por primera vez en el escenario del rock internacional, a fines de los setenta, The B-52's podían ser confundidos con un grupo de criaturas alienígenas provenientes del planeta del Kitsch. Su música, en efecto, destacaba por su extravagante e intensa mezcla de estilos: desde los grupos vocales de los años cincuenta y sesenta, hasta las locuras cósmicas de Captain Beefheart y los ritmos del Caribe. Todo ello, naturalmente, mezclado con una acentuada tendencia a hacer música por diversión, para bailar, para mover brazos y piernas en las pistas de baile de las discotecas. A todo esto debe agregarse la adopción de ropa de colores chillones, vestidos pasados de moda y cortes de pelo de los años cincuenta; el nombre B-52's deriva precisamente de un término usado en los años cincuenta para definir el peinado adoptado por las dos chicas del grupo. The B-52's nacieron en Athens, en Georgia, a fines de 1976, constituidos por un grupo de compañeros de escuela cansados de las cancioncillas edulcoradas de Jackson Browne y de The Eagles, que dominaban las listas de éxitos estadounidenses. Su estilo era tan elemental que llegó a ser inimitable y fascinante: una secuencia rítmica sencilla y funcional, y unos pocos acordes de teclado y de guitarra; lo suficiente para trazar una melodía sobre la cual las muchachas tejen pequeños coros.