Mucha historia arriba del escenario. Por un lado, casi toda la banda que vivió, en el mismo estadio, 14 años atrás, su última presentación junto a Axl Rose con Guns N' Roses. Por otro lado, EL frontman. El Mick Jagger del grunge. Scott Weiland, el histriónico ex-líder de los Stone Temple Pilots, los cuales nunca habían venido. Al salir al escenario, Matt Sorum empezó a darle a la batería al ritmo del "Oléeee oléeee oléeee Pilots!!! Pilots!!!" para que todo River estalle. Con una facha indiscutible, Weiland, salió con anteojos negros y sombrero militar, a arengar como el solo sabe a todo el campo de juego. Increíble
Todavía fumaba. Fue incontable la cantidad de cigarrilos que se prendió mientras tocaba. Por momentos parecía que los producía él mismo porque nunca lo veías tirarlos. Un detalle que le dió más mística a su personaje. La sombra reflejada en las luces del escenario de un tipo enorme, con el humo a su alrededor no hacía más que engrandencer la figura de Slash. Cuando sorprendió a todo River con una versión de otro planeta de Wish You Were Here de Pink Floyd (tema que un mes antes, Roger Waters tocó en el mismo estadio), el público no hizo más que quedarse mirando con la boca abierta y aplaudiendo en cada solo.
No podían faltar. Cuando arrancó Mr. Brownstone, recordó a aquellos shows de los 90's con todo River coreando el riff de la viola y saltando. Con Sex Type Thing el público fue más tímido ya que en su mayoría, la gente fue por los ex-Guns y en el momento que tocaron It's So Easy River se vino abajo. Una fiesta
bschery
$110 pagué el campo...