Ésta fue la primer visita de Biafra al país. Su antigua banda, los Dead Kennedys vinieron a Argentina en 2001, pero obviamente sin él.
Hace tiempo que se esperaba la visita de Jello. Fue el primer encuentro, y la gente lo dejó todo: coreando los riff de guitarra, haciendo crowd-surf desde el escenario y armando ronda, tras ronda de pogo.
A pesar de haber pasado los 50 pirulos, Biafra sigue siendo uno de los mejores frontman que siguen dando vuelta. Aquellas dos noches habló bastante con la gente, se puso en cuero, y hasta saltó un par de veces al público (durante Holiday in Cambodia' saltó no una, sino DOS veces consecutivas).
Para ambos shows se vendía entrada General. En Rosario salió 80 mangos, y en Buenos Aires 130.