Entre los grupos surgidos de las cenizas de Deep Purple, Whitesnake fueron los que más claramente trataron de superar los errores del pasado. Aunque Rainbow y Gillan nunca habían olvidado, en el curso de sus aventuras, las lecciones del pasado reciente, David Coverdale y Whitesnake intentaron jugar con el alma blues que Deep Purple habían controlado parcialmente, pero evitando cometer los mismos errores que decretaron su fin. Así se justifica la decisión de aprovechar al máximo a los dos guitarristas y de mantener a la banda bajo el control de un líder bien definido, aun a costa de recurrir a frecuentes sustituciones. Whitesnake no nacieron inmediatamente después de la definitiva disolución de Deep Purple; David Coverdale -que había sido cantante en los dos últimos años de vida del grupo-, al poco de la separación, acaecida en 1976, intentó primero la carrera en solitario, grabando un par de álbumes, el primero de los cuales se tituló proféticamente 'Whitesnake'.